Detente en una calle transitada, una plaza, parque o alameda y observa a las personas. Algunas van de prisa, otras van calmadas y quizás otras más deambulan sin sentido. ¿A dón.
Para un pueblo como el que hoy denominamos “mexicano” la forma de hablar es fundamental. Pocas veces pensamos en ello pero tiene profundas razones. Querámoslo o no, somos mest.
Una vez al año nos damos cita para recibir a los que se fueron a la otra dimensión cuántica.
Cruzaron el umbral de lo tangible pero no nos abandonaron.
Simplemente se cans.